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Es blanca, es contemporánea, tiene piezas de diseño... pero no es una
casa fría. ¿La fórmula para lograrlo? Darle calidez con muebles de
madera color miel y fibras vegetales. |
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La situación privilegiada de
esta casa cautivó a Amaya. “Es una construcción del siglo XIX. Está en el lugar perfecto: al norte tiene
la montaña, que la protege de la tramontana menorquina, y al sur linda
con un río, así que durante todo el día se disfruta del Sol y del susurro del agua”. El reto llegó a la hora de rehabilitarla,
porque la normativa de la zona no permite cambiar el aspecto exterior de
las construcciones antiguas. “Tuve que ceñirme al volumen original. Eso
sí, ¡por dentro lo tiramos todo!”, explica. |
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Interiorista de
profesión, ella misma llevó a cabo la reforma de esta casa en
colaboración con los arquitectos Rafael García y Cristina Farreny, y el
constructor Antonio Marqués. Para aprovechar la orientación de la casa
se creó un porche con el techo abierto donde se suceden una
zona de estar y un comedor de exterior. Frente al porche, se construyó
una piscina: “Es fantástico bañarse rodeada de tanta vegetación”,
describe Amaya Navarro. Y es que la finca se encuentra sobre el Parque
Natural de s’Albufera des Grau, un auténtico vergel. |
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Unas puertas
correderas conducen al interior de la casa.
“Al hacer la reforma dejamos el frente acristalado para que el salón
estuviera abierto al jardín y fuera una extensión del porche”, comenta.
Por la misma razón eligió materiales naturales para la decoración, que
dan un aire fresco y potencian la relación con el exterior. |
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Con la intención de poder pasar en la casa alguna temporada de
invierno, se instaló una chimenea de hierro en un rincón del salón.
Una mecedora y una lámpara de pie crean un encantador rincón de lectura
junto al fuego. Los tonos claros que reinan en el interior, incluidos
los techos, que se pintaron de blanco, multiplican la impresionante luz
natural que tiene la casa. Para la cocina también se apostó por el
blonco,
que tiñe los muebles que la propia Amaya diseñó. Una gran mesa de
madera situada en el centro da un toque acogedor y se convierte en
comedor cuando el tiempo no permite comer fuera. |
Con la idea de crear un dormitorio en suite, se levantó un tabique de media altura que sirve de apoyo a la cama por un lado y a los lavabos
por otro. Y, de nuevo, se optó por una decoración “con pocos muebles,
colores claros y textiles ligeros. Lo justo para un descanso cómodo y
tranquilo".
Gracias Amaya, por enseñarnos tu preciosa casa!!!
Via: Revista El Mueble
Qué belleza!Es maravillosa con esos toques claros de madera en esa base blanca de decoración que parece dar paso a esa naturaleza...para disfrutarla!bss!
ResponderEliminarqué bonitas fotos y casas!
ResponderEliminarEs preciosa tanto por dentro como por fuera .
ResponderEliminarBesos !!
Olá, vim agradecer sua visitinha e conhecer seu blog, claro que estou seguindo, adorei seus posts e sua viagem!!! Beijos, Cá.
ResponderEliminarwww.rosaacessorios.blogspot.com.br
Olá, vim agradecer sua visitinha e conhecer seu blog, claro que estou seguindo, adorei seus posts e sua viagem!!! Beijos, Cá.
ResponderEliminarwww.rosaacessorios.blogspot.com.br
Nossa td muito bonito,adorei.
ResponderEliminarObrigado pela visita ao meu blog
bjos!!
Es una casa excepcional, con mucha luz, amplia y preciosa.
ResponderEliminarEs una suerte poder vivir ahí.
Un beso